sábado, 9 de agosto de 2014

RECUERDOS EN BLANCO Y NEGRO

MAÑANA DE DOMINGO, vuelta atrás en mis recuerdos, todos en blanco y negro, como antes, también como antaño de la mano de mi padre,  hoy él de la mía, emociones muy enfrentadas, vuelta al ladrillo viejo a los hierros oxidados y a la madera mil veces repintada, esta es mi infancia, no renegare nunca de ella, huele a miedo, esperanza y a toros, mi padre se emociona al volver a ver que le reconocen después de tantos años, yo me emociono solo de ver su alegría, hoy esta mañana, no le duele nada, contento de devolverle  parte de su vida y su afición,  yo me reencuentro con un mundo que me atrapo, me sedujo y me sigue enamorando a pesar de mis devaneos con el otro lado, esto has de sentirlo para entenderlo, toda mi vida de una u otra manera ha girado en torno al toro, con cada edad mi opinión era diferente, pero siempre sabiendo que lo llevo dentro de mí que me parece el animal más bonito que pisa la tierra y que junto al caballo forman la estampa ideal para llenar mi objetivo.

Recuerdo a mi Abuelo sentado en la estatua, recuerdo esconderme entre sus arcos jugando al escondite con mis hermanos, recuerdo, sentarme, tarde de toros tras tarde de toros, en el tendido cuatro, en la losa que cubre la entrada a la enfermería, con mis dos hermanos, (sin saber siquiera que uno sería un Torerazo y otro un gran y querido corredor de encierros), mientras mi padre sacaba su jornal vendiendo bebidas, para mantener a cuatro churumbeles en los años sesenta y setenta, recuerdo el juego al salir, de los tres, para ver quien encontraba entre el gentío a mi Madre y a mi Abuela, recuerdo saber ,como se criaba un toro, como crecía, donde pastaban, que comen, conocía a personas que vivían solo para criarlos, y sufrían y gozaban con él, que su vida era única y exclusivamente el toro, viajamos por toda España siguiendo el sueño de mi hermano y viéndole torear en muchísimas plazas.

En definitiva, siento que no se puede renegar de algo que llevas metido en la sangre y que has mamado toda tu vida, además no quiero, soy así, los que me conocéis de antes ya lo sabíais y los más recientes ya lo sabéis, este es mi muro y este soy yo.

Gracia Apa por esta mañana de emoción y recuerdos, gracias por seguir a mi lado y gracias por esas lagrimillas que he visto en tus ojos, me has vuelto a recordar quien soy, TE QUIERO.





































 

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